
El odio y el amor tienen parecidos muy razonables.
Los dos son sentimientos obsesivos, absolutos; o todo, o nada.
Precisamente es por eso por lo que dicen que del amor al odio hay un paso... No hay punto medio, créeme. Lo intenté, si, y que fracasé también lo puedo decir.
La amo, sí. Pero ese sentimiento, esa dependencia que me crea, la odio. Nunca había necesitado nada, y ahora que no tengo nada es cuando más lo necesito.
No hay comentarios:
Publicar un comentario